• “La gente quiere a Huevo porque es noble, un tipo sin maldad”

Alejandro Muller analiza la repercusión que tuvo Huevo, su personaje, a pocas horas del gran final de Valientes

¿Cómo asumís el hecho de ser la revelación de Valientes?

Para mí estar en Valientes fue muy importante porque me abrió un espectro de cosas que no me imaginé que en un año me iban a pasar. El reconocimiento de tanta diversidad de gente, de chicos hasta abuelos. Fue un personaje muy querido en la tira, y a mí me sorprendió mucho. Lo que pasa es que Valientes superó las expectativas de todo el mundo, inclusive de Adrián Suar, al que he escuchado decir que este es el éxito más grande de su carrera.

¿Qué diferencias podés mencionar entre el planteo inicial de tu personaje y lo que sucedió después?

En realidad, se planteó que el personaje iba a tener importancia desde el primer momento, que iba a tener un papel en la vida de los tres valientes, pero no una importancia como la terminó teniendo. Igualmente yo creo que en esta tira todos tuvieron su protagonismo, y que por eso funcionó tan bien, porque cada uno tuvo su espacio para poder trabajar.

¿Fuiste vos el mentor de la caracterización de Huevo?

La verdad que fue un trabajo en equipo. Yo al leer los primeros libretos ya me lo había imaginado más o menos así. Y bueno, la primera vez que fui a grabar fui con los pelos un poco parados, y el guionista me pidió que me los bajara un poco y yo hacía que iba a la peluquería, y volvía con el mismo peinado, y entonces fue quedando. Lo mismo pasó con la ropa de colores que yo imaginé y que inmediatamente las vestuaristas adoptaron. También pasó con el personaje en sí, porque ya después los técnicos me decían: “Huevo diría esto en esta situación”.

¿Por qué creés que la gente se identificó con un antihéroe como el tuyo?

Fundamentalmente porque Huevo es un personaje noble, un tipo sin maldad, sin malas intenciones, que jamás dijo una mala palabra en toda la tira. Creo que el público compró eso.